Luna roja

A la lista de construcciones humanas visibles desde el espacio hay que añadir las colonias de la Luna. Las redes de cúpulas y tubos más grandes son visibles directamente, pero lo que verdaderamnente las delata, a todas, son las luces instaladas en las cúpulas: azules y verdes principalmente.

Pensábamos que las luces eran simplemente para marcar las posiciones de las cúpulas, para ayudar a las naves a orientarse. Hasta ese día. Al principio fue una luz roja “Mira, alguien ha usado un color distinto”. “Seguro que han sido los rusos o los chinos”, bromeaban otros. Pero luego apareció otra, y otra más, y se iban extendiendo como manchas de moho hasta que en apenas un mes toda la Luna estuvo teñida de rojo.

Alguien nos explicó que se había producido un fallo en cascada de los sistemas vitales. Cuando fallo la primera cúpula, las de alrededor trataron de compensarlo y transferir parte de sus recursos. Así es como estaban programados los módulos. Pero se sobrecargaron y fallaron también. Quizá se hubiera podido controlar si la red de cúpulas se hubiera organizado de otra manera, pero cuando el desastre alcanzó la cúpula principal, con sus decenas de conexiones, supimos que estaba todo perdido. Apenas pudieron rescatar al 10% de los colonos. Esperamos demasiado tiempo sin entender cómo se propagan estos fenómenos. Bueno, hubo quien sí lo entendía y trato de advertirnos, pero no hicimos caso, como tantas otras veces.